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jueves, 1 de octubre de 2020

CONFERENCIAS: LITERATURA GRECOLATINA

XXVIII Ciclo de Otoño que organiza la Delegación de Madrid de la Sociedad Española de Estudios Clásicos. Su título y eje temático es Amar después de leer: diez obras inmotales de la Literatura Clásica.
La conferencias se desarrollan, a lo largo de diez sesiones, desde el 1 de octubre hasta el 3 de diciembre de 2020 y se pueden seguir en vídeo en este enlace.

viernes, 30 de diciembre de 2011

JUGAR CON LAS PALABRAS



Las palabras construyen nuestro pensamiento, hacen la vida inteligible, a nuestra medida, humana, bella. Matizan nuestras emociones, gracias a ellas razonamos con precisión. En definitiva, son imprescindibles.
Terminamos el 2011 con una estimulante entrevista al poeta y "nombrador" Fernando Beltrán: escuchad en el enlace sólo desde el minuto 11 al 25.
Es interesante cómo destaca la importancia de aprender cada día, trabajar sin desaliento y encontrar una ocupación en la que se disfrute con lo que se hace, aunque haya que inventarla. Y, como las ideas también se obtienen en los libros, os recomiendo una ojeada a Cratilo, el diálogo de Platón, que encontraréis en la biblioteca del edificio nuevo en nuestro Instituto.
Tan sólo hay un pequeño lapsus en la entrevista. A propósito de la utilidad de las lenguas clásicas en la publicidad, habla de la multitud de nombres derivados del latín. Y sí es cierto que, además de las terminaciones más conocidas en -us o -um, las de -alia e -ia, que tanto abundan ahora en publicidad, proceden de neutros plurales de esa lengua (ACERALIA, CONSTRUCTALIA, AQUALIA, FAUNIA,...), pero la terminación en -eus que cita es propia de nombres griegos (Ἀχιλλεύς, Ὀδυσσεύς, Θησεύς, ἱππεύς, κεραμεύς), como también lo son -ma y -mata (SOMA, PNEUMA, GRAMMATA, STIGMATA,...).

Os gustará visitar la maravillosa página web de Fernando Beltrán, El nombre de las cosas, y os invito a recrearos en sus citas y a rastrear en ella los nombres de origen griego y latino. El libro que acaba de editar se titula también El nombre de las cosas.
Porque las palabras son imprescindibles y los filólogos fundamentales, esta entrevista hará felices a los amantes del lenguaje. Después de oírla ¿no os parece aún más ignorante quien cuestiona "para qué sirven las Humanidades"?

¡¡¡ Feliz 2012... nos queda el humor !!!
en el libro de Douglas Wrigth titulado Ciclopedia.

viernes, 21 de enero de 2011

¿QUIÉN DICE QUE NO SE USAN LAS LENGUAS CLÁSICAS?

REPASANDO EL MITO DE LA CAVERNA EN PLATÓN
VIÑETA: ÍTACA

Hoy en una clase de Cultura Clásica en 4º de E.S.O. comentaba un alumno que no conoce a nadie que estudie latín. Claro, se mueve en un círculo demasiado reducido, yo a su edad tampoco sabía de nadie. Pero me da qué pensar el pedestal en el que estamos colocando los avances de las nuevas tecnologías, porque tampoco hacemos uso de ellas como debiéramos. Internet, por ejemplo, es una muestra de las enormes posibilidades que existen para compartir conocimientos, pero no está siempre ahí todo lo que buscamos, con frecuencia falta lo realmente útil e interesante, o está en otro idioma, o hay tanta información que se hace interminable discriminar. Y mientras nos distraemos con usar o no el ordenador perdemos el tiempo que deberíamos dedicar a estudiar, a asimilar en silencio.

A la pregunta de quién emplea actualmente las lengua clásicas
aquí tenéis algunas repuestas con enlaces:


También hemos hablado en clase de por qué se estudian determinadas asignaturas y del recurrente "para qué sirve", que impregna ahora la educación como si todo tuviera que traducirse en una compensación económica. El afán de saber es consustancial al ser humano y gracias a esa inquietud evolucionamos, nos desarrollamos como especie y sabemos desenvolvernos en el mundo. Por eso surgió la filosofía en la Grecia antigua y por ella nuestra civilización ha alcanzado su actual nivel, como hemos estudiado en estos días. Cada asignatura (y sobre todo las que son más complejas y nos hacen esforzarnos más) amplía nuestro horizonte intelectual y nos abre nuevos caminos, que siempre utilizaremos para avanzar en todos los sentidos. Si tenemos afán de saber y nos aplicamos a estudiar con dedicación, nuestra inteligencia será como una mancha de aceite que se extenderá imparable comprendiendo cuanto nos rodea. Pero si somos tacaños con nuestra mente, si no mejoramos y desarrollamos nuestras capacidades, si elegimos asignaturas fáciles o las que dicen que son "muy útiles ahora", viviremos siempre a remolque de lo que los oportunistas quieran hacer de nosotros y no tendremos un criterio propio: simplemente seremos menos inteligentes ¿y eso para qué sirve? Algunos se cuestionan si estudiar tiene alguna utilidad, pero está claro que lo que no la tiene es no hacer nada. Estudiad todo lo que podáis, os salvará la vida.


SÓLO SÉ QUE NO SÉ NADA,
ἕν οἶδα ὅτι οὐδὲν οἶδα (Sócrates)

ESTAR EDUCADO SIGNIFICA NO EQUIVOCARSE DE SITIO NI DE MOMENTO

IMAGEN: E.F.YD.E.

El artículo Enseñar a obedecer de Santiago Alba Rico es un buen ejemplo de cómo resulta no necesaria, imprescindible, una base cultural grecolatina para pensar y expresarse con riqueza: veréis que está plagado de referencias al mundo clásico.
Pero también os lo recomiendo, sobre todo a los sufridos compañeros docentes, a los que estáis más que preocupados por los espeluznantes derroteros que está tomando nuestra profesión, porque es una lúcida reflexión sobre el desmoronamiento de todo principio educativo que presenciamos desde hace años.
Y si queréis leer otro par de artículos interesantes no tienen desperdicio algunos del blog DOCEO ET DISCO*ΔΙΔΑΣΚΩ ΚΑΙ ΜΑΝΘΑΝΩ. A ver si llegamos a tiempo de salvar la educación.

domingo, 2 de mayo de 2010

HISTORIA GRIEGA. LA ATLÁNTIDA.

Cuando Platón narró, en sus diálogos Timeo y Critias, el mito de la Atlántida seguro que no imaginaba que dicha leyenda fuera a tener tanto eco en nuestra época - se puede leer en esta entrada un fragmento del Timeo describiéndola -.
Como sucedió con Troya, Micenas o Cnosos el empeño de los arqueólogos por hallar qué hay de verdad en las leyendas nos ha descubierto una fabulosa realidad. Así algunos creen que el origen del la destrucción de la Atlántida está en la terrible erupción del volcán de la isla de Thera, hace unos 3500 años, como se muestra en el documental Mundos perdidos: la Atlántida.

Otra teoría es la que postula que fue la civilización de Tartessos, en nuestra península ibérica, la que que al desaparecer dio origen a esta leyenda.

La leyenda es tan sugerente que se presta a disparar la imaginación más romántica, como la del novelista francés Julio Verne en su fantástica obra Veinte mil leguas de viaje submarino. Uno de los protagonistas es el capitán Nemo, que en latín significa "nadie". Claramente es una alusión a la Odisea, pues cuando Ulises queda atrapado con sus compañeros en la cueva del cíclope, engaña a Polifemo y, para no darle su verdadero nombre, le dice que se llama "nadie" (en griego Οὖτις). El capitán Nemo es un trasunto del héroe homérico, aunque a la inversa, ya que Ulises lucha denodadamente contra todo tipo de penalidades que retrasan años su regreso a casa, a Ítaca, donde le espera su familia, y el capitán Nemo huye de su país al perder a su familia en trágicas circunstancias y decide recorrer los mares en su afán científico para nunca regresar.
También tiene nombre latino su nave: el Nautilus, un fantástico submarino, como el término científico para designar a un género de moluscos.


Y siguiendo con Nemo, un simpático personaje de dibujos animados toma este nombre en la entretenida película Buscando a Nemo de la productora Pixar. Se trata de un pez payaso que se lanza a recorrer el mar en busca de aventura y es su padre el que sale en su busca.